El plaza inn tiene una decoración muy original, llena de referencias a Dalí. La habitación era grande y muy bien decorada. Además, me encantó que el terrado tiene vistas espectaculares y está perfecto para relajarse. También, está muy céntrico, cerca de todo en el pueblo. La habitación tenía aire acondicionado y era silenciosa, lo que fue genial para descansar.

Lo recomiendo.

Un hotel con encanto y una experiencia única

Estuve solo una noche, pero fue suficiente para disfrutar de la decoración divertida que hace referencia a Dalí, ¡realmente única! La cama era amplia y cómoda, y la habitación estaba muy limpia. Además, el trato del personal fue magnífico. en especial, el dueño se acercó a charlar en la terraza, donde ofrecen sardinas y gambas, una buena idea para socializar. Lo único a mejorar sería la señal de Wi-Fi, que no siempre era confiable.

Decoración artística, proximidad al Museo Dalí, vistas espectaculares desde la terraza

El aire acondicionado presenta problemas de funcionamiento, haciendo que el ambiente sea incómodo. Además, el Wi-Fi es poco fiable, obligándote a reingresar códigos repetidamente. La falta de atención en algunos servicios también se nota, ¡podría mejorar!!!

El hotel ofrece una experiencia única con su decoración artística llena de cuadros y figuras, creando un ambiente acogedor e interesante.

El servicio de atención telefónica durante la noche es deficiente, ya que no hay recepcionista disponible y nadie responde a las llamadas.

cerca del museo dalí y de encantadoras calles para pasear

Disfruté de una estancia muy cómoda y tranquila con una decoración única, y además, la cercanía al famoso museo de Dalí y a restaurantes locales me permitió explorar a pie sin ningún problema. el personal fue amable y me ayudaron con información sobre los lugares que quería visitar, aunque el horario de atención podría mejorar, ya que a veces no había personal disponible para asistir en el check-out.

Pasamos 3 noches y realmente disfrutamos la terraza en la última planta, con vistas maravillosas. El desayuno era delicioso, con tortilla de patata fresca. Sin duda, volveremos.

Madre mía! Las baguettes de los restaurantes cercanos son de otro mundo, especialmente en La Churraskita, donde encontraréis delicias que os harán sentir en un festín. me encantó la limpieza impecable del hotel y la amabilidad del personal, ¡siempre dispuesto a echar una mano! Además, las vistas desde la terraza son simplemente espectaculares.

El check-in fue a las 4pm, un poco temprano tras llegar a Figueres a las 11am. Intentamos entrar un par de horas después, pero el hotel estaba completamente cerrado. Como si fuéramos en una película de misterio, esperando en la oficina de turismo bajo la lluvia. Pero bueno, todo brillaba por lo demás.

La terraza tiene vistas espectaculares de Figueres.

céntrico, cómodo, único

Qué experiencia más original! La decoración está llena de referencias a Dalí que le da un toque muy especial al lugar. Además, disfruté de la cama más cómoda que he probado. No te pierdas el terrado, ¡es perfecto para relajarte después de un día explorando!

Lo recomiendo 🥰✨

Ubicación muy buena, cerca del museo de Dalí. Habitaciones limpias y cómodas, aunque un poco pequeñas. El personal súper amable, siempre dispuesto a ayudar. El desayuno es todo un lujo, delicias locales. Perfecto para una escapada rápida y disfrutar de la ciudad.

El hotel está bien ubicado, cercano al Museo Dalí, lo que facilita las visitas. Las habitaciones son grandes, aunque presentan un poco de desgaste. La atención fue amable, pero el check-in fue lento, lo que resultó incómodo en un día caluroso. Ideal para estancias cortas.

Cama súper cómoda y atención del personal de primera. La ubicación es ideal para explorar los alrededores y disfrutar de la terraza. Sin mencionar la decoración artística que te hace sentir en un museo.

El balcón daba al patio de un bar, ¡muy romántico, casi como un hotel de campamento!

La habitación amplia y cómoda. Solo hay aparcamiento de pago, 20 euros noche.

Elegí este lugar por su ubicación. A pocos metros encontré el centro, que es bastante animado. La habitación era espaciosa y la cama cómoda, lo que me hizo sentir como en casa. Me gustó que me ofrecieron guardar mis alimentos en la nevera, fue un gran gesto del personal. Definitivamente, volveré aquí en mi próximo viaje.